La cirugía puede ser de 3 tipos diferentes:
CIRUGÍA NAVEGADA
La cirugía se realiza guiada por un sistema de coordenadas similar al de un GPS, navegamos en tiempo real y con visión tridimensional hasta la posición planificada previamente para la colocación de los implantes.
Tenemos total dominio de la inserción de las fresas y los implantes pudiendo controlar el punto de entrada y la angulación que tenemos en todo momento.
A diferencia de la cirugía guiada, en la que estás limitado a una guía quirúrgica, aquí estamos ante una cirugía 3d en “vivo”, que ayuda pero no limita, ya que el profesional ante cualquier necesidad puede variar el rumbo de la cirugía y cambiarlo si las circunstancias se lo exigen, no estamos limitados a una plantilla quirúrgica. Es por tanto una cirugía no invasiva, dinámica, adaptable, precisa y predecible que ayuda pero no limita, que nos permite tener el control total de la cirugía y nos brinda una alta precisión y exactitud gracias a la cual podemos utilizar la máxima cantidad de hueso disponible para trabajar en pacientes con escasa disponibilidad ósea evitando en muchas ocasiones complicadas regeneraciones de hueso.
Es una cirugía mínimamente invasiva, por tanto, en la mayoría de los casos no son necesarios puntos de sutura.
“Somos pioneros en la utilización de la cirugía navegada”
CIRUGÍA GUIADA
En este tipo de cirugía utilizamos la planificación previa para el diseño y confeccionamos una férula quirúrgica a través de la cual guiamos los implantes de manera precisa hasta la posición deseada, consiguiendo máxima precisión en el resultado final.
Se diferencia de la cirugía navegada en que hay que confeccionar una férula o guía previamente a la realización de la cirugía.
Al igual que en la cirugía navegada, en la mayoría de los casos no son necesarios puntos de sutura, siendo el postoperatorio mucho más llevadero para el paciente.
Este tipo de técnica se utiliza cuando la disponibilidad del hueso es reducida o cuando necesitamos colocar los implantes en una posición determinada. Este tipo de cirugía está especialmente indicada en pacientes con problemas de coagulación, ya que nos ayuda a que la apertura de la encía sea mínima sin necesidad de dar puntos de sutura.
“Utilizamos esta técnica desde hace más de 15 años”
CIRUGÍA CONVENCIONAL
Este tipo de cirugía es utilizada cuando por diferentes circunstancias necesitamos modificar la posición de la encía o realizar injertos de hueso. Nos ayudamos del TAC para valorar la disponibilidad de hueso del paciente y decidir la técnica o técnicas que se van a llevar a cabo.